Todo ser humano vive buscando felicidad quiera o no admitirlo. Somos adictos y dependientes de esa dosis extra de alegría que no de la motivacion para cada nuevo día. Siempre pensamos que somos felices cuando nos graduemos, cuando nos casemos, cuando tengamos hijos, cuando consigamos un empleo,cuando tengamos una casa propia etc.. ¿Felicidad? La rutina, el excesivo trabajo,el materialismo son el caldo de cultivo para la infelicidad. Entonces el amor eterno jurado ante un altar
se rompe y la histeria, angustia,temor son los nuevos huéspedes del hogar. Para completar el hijo tan esperado es un adolescente que ha crecido sin la presencia de sus padres por tantas ocupaciones, trabajo y terminan reemplazando esa ausencia de los padres por dependencia de las drogas, el alcohol, las malas amistades acabando su vida tal vez en el suicidio.¿Sabes? Nadie en este mundo puede darte lo que no tiene. La paz, la felicidad y la plena satisfacción de la vida , solo la encuentras en aquel que tiene el patrimonio exclusivo de bienestar. Dios y su hijo Jesucristo es lo que el ser humano necesita. Si has estado buscando el el lugar equivocado, es hora de que ya busque a DIOS.
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